Cómo preparar al deportista

Cómo preparar al deportista

Debemos diferenciar dos tratamientos, uno el día a día y otro la actividad deportiva. La palmilla postural irá colocado para el día a día, función de caminar que es cuando podremos reeducar otra vez nuestro cuerpo a la posición de equilibrio, y después la plantilla biomecánica deportiva.
Muchos pacientes acuden a la consultas por querer unas plantillas biomecánicas para hacer deporte, pero antes hay que arreglar el problema día a día con Palmillas posturales, posteriormente puede no ser necesario realizar un tratamiento deportivo, ya que hoy en día cada vez más el calzado deportivo es más técnico, por eso es aconsejable realizar los diferentes estudios para valorar la postura de mis pacientes.
Con este tipo de tratamiento lo que conseguimos en mucho de los casos, es sacar el dolor (dependerá del grado de artrosis), de origen mecánico o postural, con lo que conlleva a tener una vida más agradable.
Normalmente damos unos 4.000 pasos cada día. Si tenemos una alteración postural, entonces podemos sobrecargar alguna articulación más de la cuenta, es decir llevar al estrés en esta articulación, y con el tiempo tener artrosis en la misma.
¿Qué hace nuestro cuerpo al tener mal?, La primera cosa es modificar nuestra forma de andar, es lo que nosotros llamamos marcha antiálgica, muchas veces en modificar nuestra marcha el dolor en ese lugar desaparece siendo en otras articulaciones que observen más trabajo y poder llegar al dolor. Entramos en una espiral que muchas veces es difícil de salir, sino hacemos un tratamiento. Por eso, muchas veces el tipo de tratamiento no debe ir encaminado a subsanar las deformidades estructurales sino como actúa nuestro cuerpo. Si las reparticiones de presiones son el 50% para cada extremidad, si hay alguna alteración podremos ver como, aunque damos el paso igual, el apoyo de una extremidad será superior a la otra y eso se aprecia y lo valoramos en las plataformas de presiones. Cada uno tiene su equilibrio postural, y cuando hay un desequilibrio, es cuando surge el maldito dolor.

LESIONES DÉRMICAS
Normalmente el que práctica deporte sabe y conoce su cuerpo. Son frecuentes las lesiones de callos para exceso de rozamiento de una parte de nuestro pie, las ampollas son dolorosas y con tratamiento mejora. El aumento de sudor también provoca problemas, como las maceraciones de los pies o los hongos, por eso existen en el mercado productos farmacológicos que podemos hacer la vida más agradable para el deportistas, por eso muchos deportistas ya llevan en la bolsa de deporte productos de hidrocoloides para proteger las zonas de rozamiento o ponerse vaselina para evitar que la piel de nuestro cuerpo friccione y así evitar lesiones dérmicas, o incluso productos antifúngicos.